lunes, 11 de noviembre de 2019

Localizan en A Estrada vestigios de una fortificación militar romana


La cultura castrexa ha dejado en A Estrada decenas de castros -ninguno excavado en condiciones- y el medievo un montón de iglesias románicas con ábsides y capiteles admirables -aunque tristemente cerradas fuera del horario de los oficios religiosos-. De época romana, en cambio, no se conocen mucho más que los cimientos de un par de puentes reformados posteriormente y algunas leyendas.

Sin embargo, un reciente hallazgo del equipo de investigación Roman Army ha arrojado nueva luz sobre esta época situando en A Estrada vestigios de una presencia militar romana de carácter singular.

Roman Army es un equipo interdisciplinar de apasionados de la romanización en el que colaboran arqueólogos, historiadores, gestores del patrimonio o periodistas. Les une su interés por estudiar la presencia militar romana en el noroeste de la península Ibérica. En los últimos años han conseguido importantes avances en la investigación utilizando tecnologías de última generación.

La tecnología LiDAR (acrónimo del inglés Light Detection and Ranging o Laser Imaging Detection and Ranging) ha sido la que ha permitido localizar el posible asentamiento militar romano en A Estrada. El dispositivo utilizado permite determinar la distancia desde un emisor láser a un objeto o superficie utilizando un haz láser pulsado. De esta forma se puede visualizar la forma que presenta un terreno y reconstruirla en 3D aunque el lugar se encuentre plagado de maleza, como en el caso estradense.

El yacimiento se encuentra en un área en la que el río Ulla fluye al noroeste y la población de Souto de Vea se sitúa al este. Al este del núcleo rural se encuentra el Castro de Vea y a su noroeste está la fortificación descubierta ahora: una especie de estructura circular tipo castro que muestra un pico triangular y que se denomina O Castelo de Trascastro.

Según explica uno de los investigadores del grupo, José Costa, arqueólogo de la Universidade de Santiago de Compostela (USC), O Castelo de Trascastro «es probablemente una de las fortificaciones más atípicas que hemos localizado en Galicia». «A primera vista, parece un castro más, pero está al lado de otro castro y siempre es sospechosa la presencia de dos castros juntos», explica. «Analizando su esquema en profundidad, nos damos cuenta de que, cuando la mayor parte de los castros son redondos u ovalados, este presenta una serie de fosos y una fortificación formando un triángulo que no encaja dentro de la lógica de la Edad de Hierro y del mundo castrexo», comenta.

En Galicia, este tipo de estructura es inusual, pero en Asturias, y en el norte de Portugal, por ejemplo, se encuentran fortificaciones similares. «Aunque el estradense no está excavado, por paralelismos con las estructuras asturianas y portuguesas, podemos interpretar que la fortificación de A Estrada es una estructura romana que se corresponde con una época de primer contacto con los castros», explica el arqueólogo. «No es un campamento al uso», insiste.

Aunque la zona está hoy en día completamente cubierta por la maleza, el procesamiento de datos obtenidos con la tecnología LiDAR ha permitido distinguir marcados fosos y taludes en el Castelo de Trascastro.

José Costa constata que sería preciso excavar el yacimiento para obtener más datos sobre su carácter. Recuerda que es habitual el reaprovechamiento de castros como lugares simbólicos y zonas de dominio del territorio para la creación de campamentos romanos. En este caso, aventura que podría tratarse de un fortificación para conseguir el control visual sobre una zona de acceso al río Ulla con el objetivo de dominar el territorio e ir transformando el paisaje conforme a los intereses de expansión romanos. La datación de la estructura es compleja. La fecha habría que buscarla entre finales del siglo II antes de Cristo y principios del siglo I después de Cristo, ya que en el cambio de era es cuando los castros se desocupan en el noroeste peninsular, en un proceso lento e irregular.


Los investigadores de Roman Army cifran en unos cien los yacimientos del norte peninsular

El grupo de investigación Roman Army divulga los últimos hallazgos en arqueología militar romana a través de la web romanarmy.eu. Según cuentan, esta disciplina ha vivido una verdadera revolución desde finales del siglo pasado. El desarrollo de la arqueología urbana o el perfeccionamiento de las técnicas prospectivas permitieron grandes avances en las décadas de 1990 y 2000. Ahora, la fotografía aérea y satelital abren la investigación a un mayor número de personas y permiten superar los corsés académicos y especializados.

Hacia 1990 se conocían 11 yacimientos militares romanos de época altoimperial en las regiones norteñas de la península ibérica. Ahora podemos hablar aproximadamente de un centenar. La fotografía aérea histórica y moderna, imágenes por satélite, LiDAR aéreo y fotogrametría han abierto nuevas puertas.