viernes, 13 de abril de 2018

El 'Guernica' de Tarragona


Caos. Un caballo desbocado y, por debajo de él, la multitud. Personas que se mueven agitadas, que sufren bajo los efectos de alguna situación que los turba enormemente y plañideras en un lado, llorando por el desastre.

Seguramente, una escena como esta se habrá inmortalizado en innumerables ocasiones durante la historia del arte, pero, aun así, sorprende encontrar dos obras de arte separadas por miles de años y representadas en superficies totalmente opuestas que, sorprendentemente, que presentan una situación similar. 

Este es el caso del Sarcòfag d’Hipòlit de Tarragona, una pieza que data del siglo III dC y que se encuentra expuesta en el Pretori de Tarragona y la que es, quizás, la pintura más conocida del malagueño Pablo Picasso, el célebre Guernica. 

A pesar de la distancia temporal enorme que les separa, las dos representaciones evidencian similitudes en la disposición de las figuras en el espacio que son, como mínimo, notables. 

Setenta aniversario

El Sarcòfag d’Hipòlit fue descubierto en 1948 cerca de la Punta de la Móra, en Tarragona.

A esta conclusión llegó, hace poco tiempo, el artista Jordi Abelló, en una de sus visitas habituales al espacio que acoge el Sarcòfag d’Hipòlit. «Tuve la oportunidad de impartir una de las sesiones en las que se analiza esta pieza y, observándola atentamente, me di cuenta que las imágenes que muestra tienen muchas similitudes con el cuadro pintado por el pintor malagueño», detalla.

Tal como avanzó La Vanguardia Digital, las semejanzas entre las dos composiciones han centrado la atención de algunos expertos, justo cuando se cumplen 70 años que el Sarcòfag d’Hipòlit fue hallado en La Móra, en el año 1948. 

«No es que las dos piezas sean exactas, pero si que presentan una disposición que las hace, cuando menos, similares», afirma Abelló, que apunta que tanto una obra de arte como las otras piezas repiten estructuras e incluso personajes, como la disposición de los diferentes elementos en un plano bidimensional rectangular, los animales elegidos e incluso ciertos gestos. 

Mientras que el Sarcòfag d’Hipòlit representa la tragedia del desamor de este personaje de la mitología romana y de Fedra, por todos es conocido que la reconocida pintura de Picasso inmortaliza el bombardeo de la aviación alemana sobre la villa de Guernica, que fue pintada en 1937 y que, actualmente, se encuentra en las instalaciones del Museo Reina Sofía de Madrid. 

Abelló destaca que la relación entre las dos piezas es, en realidad, nula, ya que es imposible que una obra pudiera inspirar a la otra. «Es imposible que Picasso pudiera ver nunca la representación del Sarcòfag d’Hipòlit de Tarragona, ya que se descubrió diez años después de que pintara su Guernica, lo que hace que la casualidad sea todavía más sorprendente», añade, mientras admite que «me encantaría ver las dos piezas juntas, como si fuera posible presentarlas una a otra, pero es muy difícil». 

De momento, Abelló se ha conformado con poner en evidencia y compartir las semejanzas entre ambas obras de arte en un vídeo de Tarragona Cultura que se ha propagado en las redes y que, en los últimos días, ya ha sumado más de un millar de visualizaciones.