sábado, 24 de junio de 2017
Castrelos adaptará su sala de arqueología a las tumbas romanas de la calle Oliva
La sala de arqueología del museo Quiñones de León se está preparando para acoger la exposición de las tumbas romanas aparecidas en la calle Oliva, durante las obras en el antiguo pazo del Marqués de Valladares, hace más de un año. Las piezas, que presentan diferentes grados de conservación, cambiarán la composición actual de la sala y acapararán el protagonismo por lo que el plan para su musealización incluye cambios para adaptar las condiciones actuales.
El proyecto, ya adjudicado a la empresa Data Gestión Cultural por 3.630 euros, contempla la selección entre las siete tumbas halladas a presentar en sala tomando como criterio de selección el valor patrimonial de éstas y la capacidad física del museo para acoger las piezas seleccionadas de forma que puedan ser perfectamente integradas y acondicionadas en el espacio disponible para visita por parte del público.
Entre las condiciones del proyecto,que acometerá el arqueólogo Eduardo Méndez Quintás, se encuentra la integración de las tumbas con el resto de piezas actualmente en exposición y su contextualización para una mejor comprensión por parte de los visitantes por lo que se abre la posibilidad de que se puedan cambiar las piezas expuestas por otras más acordes con el objetivo de permitir dicha contextualización.
Los vestigios romanos se encuentran desde hace meses en el almacén del museo de Castrelos, cedidos por la empresa promotora de la rehabilitación del pazo emplazado en los números 2 y 4 de la calle Oliva, a escasos metros de la Colegiata y del edificio Cambón, que alberga el Centro de Interpretación das Illas Atlánticas. La firma Getting Back Stones prevé una inversión de unos 7 millones de euros para transformar el inmueble en un centro cultural y de ocio que también albergará establecimientos de hostelería. Una vez levantada la cautela arqueológica de la Xunta, el proyecto recibió el informe favorable de la comisión de seguimiento del Pepri del Casco Vello, trámite previo y necesario para obtener la licencia de obras, cuyo plazo de ejecución previsto es de un año y medio.