sábado, 4 de marzo de 2017
La ciudad del amor y de los gladiadores
Hacia el año 2010 las excavaciones realizadas en las cercanías de la ciudad turca de Eskihissar sacaron a la luz importantes hallazgos de Estratonicea de Caria. La urbe refundada por Antíoco I Sóter, fundador de la dinastía seléucida, en honor a su madrastra y posterior esposa, albergó un cementerio en el que se han encontrado inscripciones funerarias de al menos 12 gladiadores de época romana. Tal concentración ha llevado a algunos a pensar que la zona servía de retiro a los luchadores eméritos. No en vano, en la Antigüedad, se conocía a Estratonicea como 'la ciudad del amor y los gladiadores'.
Los hallazgos de 2010 no recibieron gran atención pública, pese a su importancia arqueológica. Y es que, además de las tumbas formadas por grandes losas de piedra, en algunos casos los investigadores hallaron bajorrelieves que acompañaban a las inscripciones funerarias. Estas representaciones, expuestas hoy en el museo de Mugla, son muy importantes para conocer el atuendo y las armas de los provocatores, un tipo de gladiadores muy populares en esa zona del Imperio Romano hacia el siglo II-III, que es de cuando datan las inhumaciones.
La relativa indiferencia mediática del cementerio de Estratonicea se explica, en parte, por el hecho de que las tumbas estaban vacías. Al parecer, todos los esqueletos se habían descompuesto por completo. Es cierto que en el cercano museo se exponen, junto a las lápidas, un par de cráneos con marcas de golpes y unos pocos huesos pero "habría que ver dónde exactamente hallaron esos huesos: dentro de las tumbas o en otro sitio vecino"- afirma Alfonso Mañas, experto en gladiatura y deportes romanos. "Quizá sea esta la razón de que no hayan explotado más el hallazgo, como sí hicieron los alemanes con los esqueletos de Éfeso", remacha Mañas.
La ciudad de Éfeso, distante 150 kilómetros de Estratonicea de Caria*, fue el escenario de un sonado descubrimiento en 2007. Un equipo de investigadores afirmaron haber encontrado una necrópolis de gladiadores. Esta afirmación se apoyaba en el hecho de que, entre numerosos restos óseos, aparecieron tres lápidas representando inequívocamente gladiadores. Además, algunos huesos mostraban signos de contusiones y traumatismos. Heridas que, por cierto, habían recibido todo tipo de cuidados y atenciones, como parecía corresponder a atletas de élite como los antiguos gladiadores
La noticia recibió mucha atención a escala global e incluso se financiaron diversos estudios de los restos, con el fin de conocer mejor la forma de vida de los luchadores. Hoy, sin embargo, muchos estudiosos, críticos con lo que consideran acaparamiento de los hallazgos por parte de los descubridores, ponen en duda que la mayoría de los cuerpos encontrados en Éfeso pertenezcan a gladiadores.
* No confundir con Estratonicea de Lidia, que se ubicaba más al norte, también dentro de la península de Anatolia. La Estratonicea de la que hablamos era uno de los enclaves más importantes del reino de Caria, que dio a la Historia personajes tan interesantes como las dos Artemisias, la reina que combatió en Salamina y la otra reina que construyó el Mausoleo.