domingo, 27 de marzo de 2016
Descubren en Villa Adriana una vivienda ricamente decorada con frescos y mosaicos
Un edificio de 1900 años de antigüedad que sirvió como vivienda dentro de la villa del emperador romano Adriano ha sido descubierto en Tívoli, Italia. El edificio está repleto de espléndidas obras de arte, han señalado los arqueólogos.
“La decoración de las habitaciones, excepcionalmente bien conservada, incluye suelos de mosaico con motivos vegetales y patrones abstractos, revestimientos de mármol [paneles], pinturas murales, y casi todo el fresco del techo”, han escrito los arqueólogos en el sumario de un documento presentado recientemente en la reunión anual del Instituto Arqueológico de América (AIA) en San Francisco.
Gran parte de las obras se encuentran ahora en pedazos, y el proceso de excavación y conservación es difícil, ha indicado Francesco de Angelis, profesor de historia del arte y arqueología de la Universidad de Columbia en Nueva York, quien está dirigiendo el trabajo del equipo.
“Es como un puzle; tenemos todas las piezas, sólo tenemos que juntarlas, y por supuesto conseguir limpiarlas [y] consolidarlas,” ha manifestado de Angelis a Live Science.
El edificio recién descubierto probablemente fue utilizado como vivienda por un individuo de alto rango, pero no por alguien que formaba parte del entorno más cercano al emperador, ha señalado. Viviendas similares han sido encontradas en la ciudad romana de Ostia. Estas viviendas “son confortables, son lujosas en cierta medida”, pero no son las casas de los aristócratas más acaudalados, ha señalado de Angelis.
El equipo ha utilizado una combinación de técnicas, incluyendo escaneos de radar para ver debajo de la superficie en el lugar y ha descubierto que la vivienda es parte de un complejo más grande sin excavar dentro de Villa Adriana. “El edificio que estamos excavando no es un edificio aislado. Formaba parte de un grupo de estructuras más amplio”, ha indicado De Angelis. A partir de los escaneos de radar el complejo aparece “casi como un barrio dentro de la villa,” ha manifestado de Angelis, aunque ha agregado que no se sabrá cómo es el resto del complejo hasta que no se excave.
La Villa de Adriano
Villa Adriana se encuentra a unos 30 kilómetros de Roma. En la antigüedad ocupaba un terreno de unas 120 hectáreas, es decir, una superficie casi el doble que la ciudad de Pompeya (si bien Villa Adriana cuenta con muchos más espacios abiertos). La villa contaba con numerosas estructuras, entre ellas santuarios, palacios, termas, bibliotecas y jardines.
Según de Angelis, Adriano (que gobernó del 117-138 d.C.) viajó con mucha frecuencia por todo el Imperio Romano, por lo que hubo largos periodos de tiempo en los que no residió en la villa. Tras la muerte de Adriano, sus sucesores utilizaron también la villa cuando su calendario se lo permitía, ha indicado de Angelis.
Según de Angelis, “los habitantes reales de la villa, podríamos decir, eran el personal y los empleados que estaban allí y la mantenían, teniéndola limpia y preparada para cuando llegara el emperador”, y la evidencia arqueológica -añade- sugiere que este personal habría ocupado la villa de forma continua durante varios siglos. El equipo espera conocer más sobre ello en futuras temporadas de trabajo.