En torno a siete tumbas de origen romano, datadas entre los siglos III al V d.C. han sido localizadas durante las obras de construcción de una vivienda unifamiliar situada en un solar de la zona conocida como Los Tres Pasos, concretamente junto al colegio de Nuestra Señora de La Providencia, según informaron a Diario Palentino expertos en arqueología y según pudo comprobar dicho periódico en el mismo lugar del hallazgo.
Tres de las tumbas permanecían en la tarde de ayer tapadas con un toldo negro, mientras que el resto eran visibles para los numerosos curiosos que se acercaron hasta el lugar. Según los expertos consultados, son tumbas de inhumación de época romana, pero más tardías, concretamente fechadas entre los siglos III y V d.C, según informa el mencionado rotativo.
Están realizadas con tégulas y suelen ser de terracota, planas, rectangulares o trapezoidales, con dos pestañas o rebordes a lo largo de los lados mayores. Técnicamente se denominan a capuccina y recogían habitualmente las cenizas de los difuntos. Según la información aportada a Diario Palentino no son las primeras tumbas halladas en este lugar puesto que durante las obras de construcción de la pasarela sobre la línea férrea de Los Tres Pasos otros dos enterramientos de similares características también salieron a la luz.
No obstante, el conjunto descubierto podría pertenecer a la denominada científicamente como necrópolis de Eras del Bosque, un yacimiento con materiales de tradición indígena y plenamente romanos, situado en la ciudad, concretamente en la zona norte-este, según los datos que aporta Diario Palentino.
Las primeras noticias de materiales se sitúan entre los años1860 y 1864 debido al desarrollo de las obras del ferrocarril (Mariano del Amo 1992: 173) según la documentación de Francisco Simón Nieto y Becerro de Bengoa. Se trata de una necrópolis que posteriormente va ampliándose en una franja al este y noreste del recinto antiguo, entre la desaparecida muralla y la vía férrea, cuyos límites norte y sur estaría, respectivamente, en las inmediaciones del cementerio viejo y la estación de pequeña velocidad. Sus enterramientos corresponderían a una zona plenamente romanizada, como demuestran las inhumaciones en sepulcros con cubierta a modo de bisel, y también rito de incineración. La última parte de la necrópolis sería la de Eras del Bosque propiamente dicha.
Los límites de tal recinto los marcan el camino de hierro, cuya exploración dio lugar al hallazgo de numerosas lápidas sepulcrales, cipos y estelas, con muchos otros objetos que se dispersaron en manos de los anticuarios. Los enterramientos, por su parte, se disponían alineados, separados entre ellos un metro, metro y medio. Estas tumbas tenían un pequeño túmulo cubierto con piedras. (Mariano del Amo 1992: 179).
Por lo demás, lo más probable es que el Servicio de Arqueología de la Junta inicie las investigaciones pertinentes para determinar el valor arqueológico del hallazgo. Dichas investigaciones se suelen llevar a cabo a través de catas y excavaciones y posteriormente, se determinará, una vez catalogados, si se conservan en el mismo lugar donde han sido localizados o se recogen y se llevan a dependencias especializadas.