lunes, 9 de enero de 2017
El Thyssen logra la financiación para restaurar y abrir al público su zona arqueológica
Es una de las cuentas pendientes del Museo Carmen Thyssen. La recuperación definitiva de la casa romana que surgió durante las excavaciones para la construcción de la pinacoteca en los terrenos del renacentista palacio de Villalón. Antes de ser centro expositivo, el inmueble fue un conocido comercio malagueño en el siglo XX y una elegante residencia de familias aristocráticas centurias atrás. Un uso que todavía se perdía aún más en el tiempo con el descubrimiento de la villa romana de los siglos I y II d. C., que probablemente también hizo de antecedente comercial del inmueble ya que se sospecha que fue la morada de un próspero mercader. Desde que se sacaron a la luz en 2009, esta zona arqueológica esta pendiente de su definitiva recuperación, una intervención que permitirá su apertura al público. Un proyecto para el que el Ayuntamiento de Málaga ya tiene financiación.
La Gerencia Municipal de Urbanismo se encargará de acometer las obras de rehabilitación del sótano para el que ha desarrollado un diseño museológico que lo convierta en una nueva sala de exposiciones del Museo Carmen Thyssen. Aunque esta vez será una invitación a recorrer y conocer el pasado romano de la ciudad. La actuación arqueológica está presupuestada en 260.755 euros y ha sido incluida dentro del préstamo recientemente aprobado por Unicaja por un valor total de 11,5 millones de euros y destinado al Plan Económico Financiero 2016-17 del Ayuntamiento.
Las obras para la musealización del yacimiento arqueológico no tiene todavía fecha de inicio, ya que la Gerencia de Urbanismo trabaja en estos momentos en resolver el principal escollo técnico de la actuación, la filtraciones de agua, sobre todo en periodos de lluvias como ha ocurrido en las últimas semanas. Un problema que no es específico del Museo Carmen Thyssen, sino que es habitual en los sótanos con restos arqueológicos de la capital.
Consolidación preventiva
Según explica el gerente de la pinacoteca, Javier Ferrer, en 2016 se realizaron obras de consolidación de los muros y vías romanas del subsuelo a la espera de la actuación definitiva para su rehabilitación y apertura al público, lo que igualará el Thyssen con otros centros expositivos de la capital con yacimientos, como el Museo Picasso o la Aduana.
El patrimonio arqueológico del Palacio de Villalón, en el que la empresa Arqueosur ha realizado trabajos de consolidación preventiva, aporta además información relevante al pasado de la ciudad. Una de las piezas más destacadas es el denominado Ninfeo de los Peces, una fuente romana que incluye unas pinturas murales que son las más antiguas conservadas en la capital. Un atún, una dorada, una chopa y un voraz dibujados con llamativos colores sobre fondo negro son los protagonistas marinos de esta singular decoración romana que prolongará hasta el sótano del Museo Carmen Thyssen la exhibición pictorica de sus salas superiores.
Además, la zona arqueológica, cuya ocupación se ha datado entre los siglos Iy V d. C., también incluye mosaicos geométricos decorativos, fragmentos de una escultura de bronce de la época romana y piezas de cerámica de diversas épocas y monedas. Según las investigaciones, además de servir de residencia, esta villa también tuvo uso industrial con una factoría de salazones y comercial con una tienda de conservas, mientras que en su última etapa albergó una necrópolis bizantina. Un pasado que, tras su recuperación, será visitable.