jueves, 20 de junio de 2019

Un puente romano cruzaba el Guadalquivir junto al Arco de Augusto descubierto en Mengíbar


El arco de Augusto descubierto el año pasado en el término del municipio jiennense de Mengíbar no es el único vestigio romano de relevancia encontrado en la parcela en la que se llevan a cabo las excavaciones: el Instituto de Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén ha descubierto en ella restos que acreditan que un puente romano cruzaba el río Guadalquivir junto a este enclave de gran importancia histórica y artística.

Además, el hallazgo en la zona de vestigios de edificios romanos apuntala la monumentalidad de un lugar en el que hace más de 20 siglos se construyó el arco que separaba la Tarraconense de la Bética, según ha resaltado el investigador de la institución educativa y director del proyecto Iliturgi, Juan Pedro Bellón, quien ha anunciado que previsiblemente se encontrarán más vestigios cuando se lleve a cabo una intervención junto al río.

El Instituto de Arqueología Ibérica continuará con los trabajos relativos al Arco de Augusto, puerta de entrada a la Bética romana, y en el Cerro de la Muela, donde se ubica la ciudad fortificada ibera de Iliturgi. Así, previsiblemente tras el verano, comience una nueva campaña de excavaciones en la fortificación, atacada en el año 206 por Escipión el Africano, «de la que necesitamos conocer más cosas», ha expuesto el experto de la Universidad.
Precisamente, la institución académica, a través de la cátedra arqueólogo Manuel de Góngora- Empresa Familiar Calderón del Instituto de Arqueología Ibérica, va a catalogar y restaurar la colección de restos romanos pertenecientes a la casa palacio de Mengíbar. Una actuación que ya ha comenzado y que se unen a las ya puestas en funcionamiento dentro del proyecto Iliturgi.

Los datos han sido presentados por Manuel Molinos, director del Instituto de Arqueología Ibérica, Juan Bravo, alcalde de Mengíbar, Jesús Calderón, socio director del area de finanzas y organización de Construcciones Calderón, y Juan Pedro Bellón, que ha destacado la espectacularidad de la colección, formada por un centenar de piezas romanas, entre las que destaca la inscripción de Sempronio Graco que sirvió para localizar Iliturgi y un miliario romano que indica la distancia a la ciudad de Cástulo.

«Muchas piezas no reúnen los requisitos de conservación y gracias a la aportación de la cátedra Calderón las sacaremos de donde están y le aplicaremos medidas de tratamiento según el diagnóstico que se ha realizado», ha expuesto el investigador, quien ha explicado que la Universidad lleva a cabo un inventario de las piezas y los restos arqueológico para poner en orden el conjunto de elementos y los digitaliza para su consulta en la red Europeana.

Por su parte, Juan Bravo ha destacado el trabajo desarrollado desde el Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Íbera, «que ha dado a conocer el nombre del municipio por todo el mundo». Además, se refirió al edificio que alberga las piezas como «emblemático» y reiteró el compromiso del Ayuntamiento con el patrimonio y la cultura.

En su turno, Manuel Molinos ha expresado la importancia de la transferencia del conocimiento desde la investigación, «que en este caso no hay únicamente que hacer visible, sino también que sea útil para la población». «Mengíbar tiene dos elementos referenciales extraordinarios, la Iliturgi romana y la ibera, que explican una parte fundamental de la historia», afirmó.

Por último, Jesús Calderón ha explicado que esta actividad, enmarcada en la cátedra, consiste en restaurar la colección: «Cuando nos lo plantearon vimos clara esta necesidad, en la restauración el tiempo corre en contra ya que las piezas se van deteriorando», ha informado. Calderón ha destacado las sinergias y la colaboración entre el sector público y el privado: «Nos sentimos muy satisfechos de esta colaboración junto a la Universidad de Jaén y el Instituto de Arqueología Ibérica».