martes, 16 de octubre de 2018
Hallan un acueducto romano en la Sierra de Baena
Los estudios sobre el abastecimiento de agua de la antigua Iponoba (cerca de la conocida actualmente como Ermita de los Ángeles) en la localidad de Baena, ha traído consigo el hallazgo un de acueducto romano en la zona de la Sierra, cuando se estaban utilizando las últimas tecnologías en Sistemas de Información Geográfica y dos metodologías: la arqueología aérea y la arqueología del paisaje.
Concretamente, el arqueólogo baenense Guillermo Amo Velasco ha sido el descubridor de esta infraestructura ubicada tan solo a 2,5 kilómetros del municipio. En opinión del experto, "esta estructura hidráulica, fechada en el siglo I d.C., es de fácil identificación en vista de su técnica edilicia". Amo ha indicado que el estado de conservación del tramo descubierto es "aparentemente bueno y se ajusta perfectamente a las descripciones de Vitrubio, uno de los autores latinos que nos aporta referencias sobre obras públicas romanas, que distinguía tres tipos de canalizaciones, entre ellas los canales de albañilería o specus, siendo este caso el hallado".
Aunque en superficie es difícil de detectar, se trata de un acueducto de obra romana con unas dimensiones aproximadas de 60 centímetros de ancho y 50 centímetros de altura (contando desde la bóveda hasta el sedimento depositado) y con al menos nueve metros de recorrido en pendiente. Asimismo, Amo ha explicado que “en los restos encontrados se aprecia claramente la cubierta abovedada, fabricada con mortero y piedras subangulares, presentando los lados del canal un recubrimiento de opus signinum, usado para impermeabilizar, mientras que en las zonas cercanas al acueducto hay algunos materiales latericios de época romana”.
El también historiador y colaborador del Departamento de Arqueología de la Universidad de Córdoba (UCO) ha precisado que “los romanos hacían verdaderos esfuerzos por encontrar agua de calidad para utilizarla en su vida cotidiana”, de ahí que soterraban estas conducciones para “garantizar una mayor higiene”. De hecho, este acueducto servía para canalizar el agua proveniente de uno de los acuíferos de la Sierra: “lo más probable es que existieran varios ramales, uno de ellos que fuese a parar a la población baenense de la época y otro, también en estudio, que llegara hasta el Cerro del Minguillar”, ha subrayado.
El arqueológo ha agregado que posiblemente este acueducto también fue utilizado siglos después para abastecer a la Baena islámica: "esta práctica de reaprovechar estructuras hidráulicas romanas sucede en numerosos casos, por ejemplo en Medina Azahara”. Cerca de Baena ya hay otros acueductos bien estudiados tales como el de Ucubi (Espejo), Igabrum (Cabra) y los de Colonia Patricia Corduba (Córdoba).
Amo, que trabaja estas semanas para elaborar un correcto estudio del hallazgo, dirige actualmente el proyecto de investigación Territorium-Iponoba, en el que estudia, con técnicas no invasivas, el poblamiento antiguo en el Cerro del Minguillar y sus zonas periféricas, cuya cronología oscila entre finales de la Edad del Bronce, pasando por la Segunda Edad de Hierro hasta el siglo III d.C.